‘La guagua’ se para, y le pone ‘la fuerza al corazón’
La espera en la parada nunca se puede hacer eterna cuando sé que voy a subir a la guagua que me acercará a un destino que entrega a los interiores más sinceros del corazón. Mientras espero puntual la hora por la que el chófer se detendrá con seguridad y armonía frente, y a la pequeña caseta, aprovecho para no pensar y repasar otros asuntos que también ocupan el alma.
Una menos diez del mediodía. Y el sonido de la puerta de la guagua hace que corra una sonrisa por el cuerpo. Quizás originen de los nervios, pero no creo también pueden ser las ganas que animan a que el chófer arranque, y juntos en ése tiempo de trayecto y lo que dura la emisión, me emocione y sienta que las palabras son magníficas y esclarecedoras, pero que en verdad están aún lejos de lo que puede sentirse con hechos. Y eso es lo que cada vez que pillo un ticket siento.
Subida ya a la guagua. Cada uno de los pasajeros a su manera, va con los pensamientos distraídos; sin embargo, de refilón, ponen la atención a lo que suena y se escucha por ese pequeño y ‘enerno y rudimentario transistor’…
Sin perder compás ni fuerza. Ya que si hay una fuerza que no entiende de fuerza, sino de maña, ganas y gentilidad es la del corazón… La fuerza bruta existe, pero nada comparable a lo que la fuerza interior es capaz de conseguir. Con ella, aunque pueda parecer increíble, se tumba cualquier mal rollo, cualquier ineptitud… A su modo, alza positividad y actitud de vida…
Algo de esa fuerza de corazón es lo subidos en esa ruta a la programación de la “GUAGUA DEL SUR”, con el genial y fantástico chófer ‘José Manuel Pitti’… Tras haber tenido el placer de haber compartido en días anteriores el ejemplo de vida, fuerza, luz, que sin duda viene de la mano de la más Bella y gran mujer… ¡Mami!… he podido sentir LA FUERZA DEL CORAZÓN.
Fuerza que sin miedo permita sentir y vivir. Dejar de lado las cosas que condicionan a las emociones. Sin ninguna otra complicación más que la de luchar y poner FUERZA a LA FUERZA DEL CORAZÓN.
Puede alguna persona ser tan increíble, cada vez me fijo en tí, miro, y puedo mirar la belleza de la vida. Tienes una fuerza que contagia a cualquiera… Tu fuerza, se convierte en la fuerza que me das. Y das además mucha, no sé si lo sabes, per tu arancha eres fuerza…
Besotes desde acá, y tu fuerza, sigue transmitiendo.
Tusi que tienes fuerza! Da igual que no sea tel día de las madres, digo por calendario. Tu madre debe estar orgullo sísmica de una hija como tu! Pedazo madre, y pedazo hija! Abrazos maja!