La imaginación, el hombre
«El hombre que no tiene imaginación no tiene alas».
– (Muhammad Ali) –
Lo importante de vivir, a lo importante de pensar, no sólo en cosas cotidianas, sino en todo. Buscando siempre poner ése toque de gracia de la vida. Buscar y rebuscar, dentro del espacio que todos tenemos registrado a la imaginación. Llamando a su puerta, «tumbando barrreras«, poniéndole a nuestra vida y a la de los demás, un toque de imaginación; la libertad de tener imaginación.
Hacer y pensar en cosas originales, diferentes; cosas serias, graciosas, pues la imaginación no está reñida a la seriedad, a lo sobrio.
Anímate, ‘llama’ a tu imaginación y déjala volar, deja que te acompañe a volar…
Cuando escribo, dejo volar mi imaginación, intento poner un poco de ella en lo que plasmo. Imaginación de ideas a palabras, las cosas que escribo. Desde la seriedad de lo importante y lo que significa para mí el poder escribir. Mi absoluto respeto. Ahora nada de ello, impide que pueda sentir aún volar, sienta la libertad de traspasar «tumbando barreras» toda la incomunicación que de otra manera no podría; ¡¡con imaginación, volando!! Anímate
¿El ser humano, sin alas, cómo vuela?
Me paso todo el día en el aire, ¿será por eso que tengo imaginación? je, je, je…
Sin bromear, la imaginación es importantísima, cierto Arancha.
MEJORAR CADA DÍA. Éste es uno de mis lemas.
Para ello es necesario pensar y actuar, CONTINUAMENTE, con el objeto de «pulir» los defectos que todos tenemos; yo el primero… Y por esa misma razón, poner nuestra imaginación al servicio de los demás, ya sea a través de la palabra escrita o del diálogo. Así, de paso, aprendemos los unos de los otros, en un enriquecedor intercambio…
Pero también – y lo sé por experiencia – tener la mente siempre despierta, activa, ilusionada, con ganas de aprender, es vital para hacer frente a los desafíos de la vida.
Sabemos que el sufrimiento es inherente al género humano pero, gracias a una mente inquieta, se puede hacer frente a él con dignidad porque ¡¡se llega a ser feliz!! En efecto, sólo con una mente despierta, que busca y rebusca en lo interior y exterior, que tiene ilusión a que cada minuto, cada hora sorprenda con algo nuevo – positivo o negativo, porque de lo malo también se aprende – se puede hacer frente a cualquier adversidad que esté en nuestras manos evitar y/o eliminar.
Y no hay que irse muy lejos porque tú, querida Arancha, nos lo demuestras cada día.
Por supuesto que la imaginación no está reñida con la seriedad. En la vida hay que ser serio y alegre; hay momentos para todo.
Gran maravilla es la imaginación si, además, se tiene en cuenta que tiene un origen magnífico: ¡¡LA LIBERTAD!!. Libertad para pensar, decidir, sentir, dar, ayudar, consolar, compartir…
Un gran abrazo, Arancha!!
Alberto.
Alberto, ¿usted cree, que en realidad somos tan libres como creemos? Una vez pensaba igual a usted y la vida me ha dejado ver que no puedo ser tan libre en pensar, decidir… etc, etc… Cada vez más se encargan los demás de pensar y decidir. Mi deseo es continuar viviendo a mi imaginación, y no sé cómo. Una parte de mi vida oscura.
Aranchita, ojalá pudiera ser y hacer como tu, tu libertad me da envidia, saber que tienes esa capacidad de mirar las cosas aún como estas, sin dejarte enturbiar por esto que digo a don alberto, los demás!!! otras gentes opinando y decidiendo por ti, por mi…
Hasta pronto.
Cristina, ésa es una gran pregunta, ser o no ser… En el fondo todos somos libres, nos dejamos influenciar por la gente, y es cuando dejamos de tener libertad. Si para imaginar, pensar tengo que dejarme llevar por los demás, ¿qué vida me queda? Decisión y plantar cara a ese descaro de control, en el fondo hasta quien domina quiere ser libre y lo demuestra queriendo dominar a los demás, creyendo incluso es una defensa a sus sentimientos.
Estimada Cristina, se puede ser libre. Otra cosa es que sea difícil, a la vista de la sociedad que nos ha tocado vivir. Pero eso es como todo: la vida no es fácil…
La clave es no dejarse llevar por lo digan o hagan los demás, como ha apuntado «carloson».
Yo soy libre porque no me dejo influenciar por los medios de comunicación (radio, prensa, TV), ni por los políticos, sindicatos, ni por cualquier ente público/privado que tenga poder. Bastante daño hacen con el empleo de la demagogia, la mentira y, en definitiva, la manipulación de todo.
SER LIBRE SIGNIFICA TENER UN CRITERIO PROPIO – acertado o equivocado – Y VIVIR CONFORME A ESAS CONVICCIONES PERSONALES. Ya puede un político o un periodista o quien sea decir lo que quiera, que a mí no me va a manipular. Si se diera la circunstancia de que tuvieran razón en algo, lo aceptaría gustosamente. Pero todavía estoy esperando ese momento…
Es tremendo ver cómo desde que un político – por poner un ejemplo – abre la boca, miles de personas lo siguen como un rebaño a su pastor… Eso, evidentemente, no es libertad; es otra cosa…
Si cada persona fuera libre, la sociedad sería libre y funcionarían mejor las cosas. Y esto no es ciencia-ficción ni un ideal inalcanzable: los países nórdicos, Suiza, Alemania, Holanda, Canadá, Japón o Corea del Sur, son sólo algunos ejemplos.
Claro que para llegar a esa situación, es necesario algo fundamental que, a mi juicio, falla estrepitosamente en este país: la cultura. Una persona culta, es libre; una sociedad culta, es libre. No me refiero a una cultura elevadísima, rozando la erudición; no es necesario llegar a eso (aunque sería deseable…).
Y también, por qué no decirlo, es necesario unas buenas dosis de sentido común; que hasta eso se ha perdido…
Termino con una aclaración: he venido citando a los medios de comunicación y a los periodistas. Lo he hecho dada la evidente importancia que tiene; por algo la llaman «el cuarto poder».
Es ésta una noble profesión, porque está destinada a facilitar a la población información veraz sobre lo que ocurre aquí y en cualquier parte del mundo. ¿Habrá algo más noble que eso? Asímismo, se puede y se debe tener su propia «línea editorial», en consonancia con la libertad de expresión.
Ahora bien. Lo que ocurre es que se publican informaciones sesgadas, tergiversadas, incompletas o, simplemente, falsas. Y luego, para arrancar unas disculpas públicas del periodista en cuestión… se puede morir uno en el intento…
No nos engañemos: todos hemos visto la diferencia abismal que suele haber entre un «titular» y el contenido de la noticia… Y así, muchos ejemplos más…
Eso no es informar. Eso es estar alejado de lo que da sentido a la nobleza de la profesión. Simplemente, eso es estar al servicio de intereses «inconfesables» que nada tiene que ver con el sentido del periodismo, para movilizar a miles y millones de personas que, sin criterio propio, se dejan arrastrar.
Además, lo aplicable al periodismo, lo podemos hacer extensivo a todas las profesiones.
Un abrazo para todos.
Un achuchón para usted, Arancha 🙂
Alberto.
De acuerdo a su exposición Alberto, ser libres es todo, si no nos dejasemos llevar por lo que nos quieren imponer, por esos que nos quieren hacer ver que sus pensamientos son los únicos válidos otra cosa sería… el peor impedimento, dejarnos llevar, nuestro pensamiento quede anulado, no sólo como usted dice por periodístas y políticos, por todo, hasta por el vecino; lo que le gusta o no. Libertad de pensamiento y actos, siempre desde el respeto a los demás.
A veces se tiene criterio, sólo que de alguna forma inducen a no ser el correcto, casi por obligación, debemos de cambiar el pensamiento.
Me encanta poder leerle Alberto, le he dicho Arancha como me gusta saber su opinión y cómo lo hace, me gusta!! mis respetos! sin duda en muchos puntos concuerdo con su escrito. Ciertamente todos pulimos nuestros defectos, ‘odio’ mejor dicho, desagrada por incinsero quien dice no tener fallos ni errores…
Ser libre de actos y pensamientos no es fácil, más en la soceidad hipócrita en la que nos invade y emboba cada día. Somos parte de ella y parte de culpa también es de nostros por admitir y tolerar. Nos influyen tanto lo que dice, medios y políticos principalmente que nos condicionan la vida, somos como corderitos que nos dejamos manejar, y es una pena.
Siempre que sueño, que pienso, alguién viene detrás y se encarga de chafar mi pensamiento, mis deseos, y no vea lo que eso condiciona… Pensar que mis cosas no tienen sentido, que da igual lo que piense, que otros mandarán por mí. No sé si me salgo del tema, Aranchita, creo que sería bueno tocaras este tema como tu lo sabes hacer… 😉 ahí queda el recado
Sin duda comparto entre estos apuntes con alberto.
Hasta muy pronto.
Un apunte únicamente, ustedes creen que las cosas suceden o cometemos errores, que estamos en lo cierto cuando se piensa que son verdaderamente los demás los que no nos dejan ser libres, ¿están seguros? he pensado, quizás somos los que ponemos a los demás como excusa…