Intolerable y Antideportiva Actitud de un Árbitro.
Hay realidades que no se pueden obviar, y si bien hasta hace muy pocas semanas, hubiese sido posible haber comentado sobre Mario, por su participación en un equipo no discapacitado. Mientras, al no ser así, hay que hablar claro, sin gritar y sin faltar al respeto.
Un amigo a tenido a bien hacerme llegar la noticia, la cuál, debo reconocer desconocía por completo.
Por lo que una vez leída, no termino todavía creer esto sea así; por supuesto, no estoy diciendo no la creo. Únicamente me pregunto; si de verdad estas cosas son reales o si por lo contrario suceden con afán de protagonismo por parte del árbitro como es este caso.
No entiendo como pueden suceder este tipo de situaciones.
Por un lado, se fomenta la participación e integración de todos en cualquier actividad lúdica, recomendando a los padres que los chavales, hagan deporte y no pasen en sus casas jugando de forma independientes.
Sin embargo, cuando se trata de una participación en colectivos amplios, habrá que tener precaución con quién será el encargado de delimitar y hacer cumplir las normas de juego. Causa de su libre interpretación sobre acontecimientos dentro del terreno de juego.
No puedo entender que tipo de criterio ha tomado para determinar tal decisión… Esto sólo podría explicarlo él.
Yo por ahora reflexiono y resumo la noticia.
Un chaval de doce años, jugador actual del equipo Alevín C.D. Griñón, el que practica fútbol desde la edad de seis años, federado y con una ficha como la de cualquier jugador, federado, como lo están los jugadores de Primera División; y, donde supongo su ficha especifica, en la zona de observaciones, su dificultad en la audición. Por lo que, si esto es así, pensar que no necesita audífonos, es algo que no tiene lógica.
Percibo, que el arbitro del citado partido, se encuentra escaso de sensibilidad; puesto a falta de ocho minutos para la conclusión de la primera parte, pudo haberse abstenido durante ese tiempo, en hacer pasar al chaval el mal rato que durante esos momentos paso (como los que no se describen en la noticia) pudiendo haber sido en el descanso cuando podría haberse acercado a la caseta y, conversar con las partes implicadas, cerciorándose de esa manera por si era necesario, no se corría en riesgo alguno para nadie.
Indudablemente, la violencia nunca es justificable, pero tampoco, hay que actuar ante nadie de esa manera, siendo mucho menos con un chico lleno de ilusiones y ganas. Por lo que al final, el partido acabo como un pastel roto.
El árbitro, con su potestad adquirida suspendió el partido, y los padres de Mario, sensibilizados con lo acaecido protestaron airadamente, por lo que el árbitro, del cuál no se sabe su identidad, salió escoltado por la policía local a la que él mismo llamó.
Yo, que he sido jugadora de múltiples deportes, incluyendo algunos de riesgo, no termino de entender porqué ocurren estos hechos.
En tiempos en el que el deporte comienza adentrarse en las nuevas tecnologías, con sus pinganillos de comunicación, entre árbitros y asistentes, como podemos comprobar en la mayoría de partidos, como son la Liga Nacional, incluso las grandes competiciones, se produce este hecho inexplicable.
Será que los riesgos a ser sufridos por los árbitros de categorías superiores no tienen nada en común con el audífono que Mario utilizaba. Qué se puede decir, la tecnología esta desarrollada a partir de estos mismos…
Nunca un participante de juego, ya sea de manera directa u indirecta como en caso del árbitro no están absueltos en sufrir algún golpe de pelota, caída, tropiezo, etc…
También, que decir del uso de hacen diferentes jugadores que por alguna lesión o meramente por protección, utilizan: Protectores bucales, caretas protectoras, etcétera… ¿No suponen riesgo? ¿Dónde esta la diferencia de prótesis?, al final esas también conforman parte de las prótesis.
Todo mi apoyo a este chaval y su familia en su lucha por aquello que le gusta y donde cumpliendo los requisitos de edad y características futbolísticas en general, que son las realmente importan continúe dándole al balón.
De igual manera, a todos quienes puedan sentirse retraídos una vez visto esta noticia, por la que nadie debe impedir sus derechos y ganas de practicar deporte… Animarse a no dejar esto les coarte en sus ambiciones o hobby.
Ahora, con más ganas que ninguna otra ocasión, tanto Mario, como quién haya sufrido algo similar y no lo haya echo público; deben salir al campo a jugar y demostrar que no hay nada que pueda con una única opinión como la nombrada.